Thursday, May 14, 2009

Un caminar triste por los pasadizos


UN CAMINAR TRISTE POR LOS PASADIZOS

Cada mañana es un nuevo desafío
un levantarse con los ojos caídos
un caminar triste por los pasadizos

Los pasadizos de tu ausencia,
de tu sonrisa lúgubre.
Mi alma se marchita por dentro
y grita sin que el viento la escuche

En la hora de mi muerte llegará
el momento de enfrentar mi propio juicio:
todo lo que no te di, todo lo que dejé
acumulado en mis sentimientos.

Es la inconsistencia del sentir
lo que me decepcionó.
La oportunidad se esfumó,
se vistió con el traje del despido.

La sangre fluye por mis manos
fascinándose al verme sufrir.
Se excita al sentir que mi corazón
a ratos se detiene por la angustia.

Y así continúa la vida,
a pasos sollozantes,
al ritmo de un funeral
mientras el muerto
se retuerce en su tormento.

Ahora es mejor seguir escondido
escuchando los truenos del amor dormido.
Es la solución parcial del hombre que soñó
y ahora vive muerto en la desolación

Nada más triste hay en la vida que la despedida de dos mitades que creían formar un ideal común. La congoja se apodera de los latidos del corazón mientras la razón se cae a pedazos mirando las fotos del pasado.

Un momento gris, una nube agria. Sucesos inesperados que llegan en la hora menos indicada: cuando descubro otra sonrisa, otro amor que lentamente gobierna partes de mi ser. ¡La historia es un círculo!.

Aunque en mi defensa puedo decir que ahora la experiencia es mi mejor amiga. Hoy la tengo convidada a la hora del té.


Walter Schulz